lunes, 27 de febrero de 2012

Preposiciones

Cuando vayas a quererme ten cuidado, no vaya a ser que me enamore de ti.
Ante tu imagen jadeante, sudorosa, cálida y viva, yaciendo acostada bajo tu cuerpo, todos los límites se destruyen y todo lo imaginable tiene cabida. Engarzaré mis piernas cabe tu cintura, y haciendo alarde de esa sensualidad grácil que posees como instinto natural, y con un suave movimiento ingrávido, estrellarás tus labios contra mis labios con mitómana ferocidad. Tu saliva sabe a cítrico exprimido en toda su acidez salpimentado con suaves notas de azúcar; reprimo las feroces ganas de cogerte de la mano y salir desnudos a chillar un orgasmo desde el balcón. Entre tus piernas se desata la locura, en tus brazos se reprime. Giramos la cabeza, miramos hacia el horizonte reflejado en la ventana, entre jadeos no podemos evitar soltar una risa socarrona. Hasta la mismísima naturaleza nos envidia. Para poder acallarnos, solamente hace falta el alarido más profundo imaginable, rasgado por nuestra garganta, dejándonos durante un instante sin aire, con los pulmones completamente yermos. Mas según me besas en el cuello, vuelvo a recuperar la respiración y la calma reina. Me tumbo sin complejos, calmada, sobre tu pecho.
Y no puedo evitar preguntarme si lo que hay tras ese corazón que palpita tan deprisa podría enamorarme en un solo latido.


lunes, 6 de febrero de 2012

Dudas, dudas, dudas

+Te he dicho que no volvieras.

-Quería volver a verte, Venus.

+¡No! ¡Ville, por Dios, vas a volver a irte, vas a dejarme sola!

-No quiero dejarte.

+Entonces, ¿por qué te vas?

-N...no lo sé. ¿Crees que puedo controlarlo?

+¡Me duele que siempre tengas que irte!

-¿Y crees que a mí no?

+Tengo miedo...

-¿De qué?

+De quererte demasiado.

-Nunca se quiere demasiado, Venus.

+¡Pero joder, hay miles de hombres corpóreos ahí afuera, y tú solo eres un atajo de humo! ¡Podría estar con un Adonis, con un Baco, podría al menos salir a buscarlos, pero nadie me parece lo suficientemente bueno comparado contigo!

-...Te quiero.

+No digas eso, Ville, no lo sientes, no digas eso.

-Deja de contradecirme, ¿no decías tú misma que ibas a comenzar a creerte lo que te demostraban?

+no me quieres.

-Shhh...

...

-Abrázame fuerte. Abrázame, vamos, joder, abrázame.

+Quédate aquí. La gente me hiere el corazón, y hace frío.

-Tranquila, yo te protejo...


"Es él. Hm, ya te dije que te haría sufrir"

sábado, 4 de febrero de 2012

Dance

+Es la primera vez que me voy a hacer la difícil contigo, con la que voy a huir a cada movimiento, entrecerrarme como si fuera una mimosa ante cada beso, deshacerme como tú en humo e incienso, resbalar entre tus manos como si fuese una sirena recién sacada del agua con la misma habilidad que un esgrimista. Así que toma nota. Vas a ser tú el que me llore, tú el que me encuentre, tú el que me busque, el que desespere. Te va a faltar el aire, te va a saltar el corazón, y con cada roce incendiario me convertiré en agua y escurriré, con cada movimiento te arriesgas a que sesgue la cercanía.

-¿Por qué esa crueldad, Venus? ¿Por qué hacerme sucumbir en una muerte tan dulcemente amarga?

+Porque son las leyes del baile. Pensé que tenías más manejo en eso de la teoría y la práctica.